Hoy os vengo a narrar nuestra aventura canadiense ¿Os he contado alguna vez como nos perdimos en un bosque por Canadá?
Creo que fue uno de los momentos más estresantes y aventureros (y por qué no decirlo) que hemos vivido. Ocurrió en La Maurice, una preciosa región de Quebec en Canadá. Fue hace dos años, en nuestra luna de miel por Canadá.
Nos alojábamos en un hotel increíble, con vistas al lago Eau Claire. En la zona hay una fantástica oferta de ocio; desde el spa; hasta bicicletas de alquiler, rutas a pie para ver osos y kayaks para recorrer el lago.
Nosotros por la mañana hicimos una ruta en bicicleta por la zona, llegamos al lago Ford y continuamos por otro sendero. Para poneros un poco en situación, durante este trayecto en bici, no paraba de mirar para atrás por si le daba a un oso por salir a nuestra captura (si, he visto mucho youtube con esas persecuciones, locura total la mía). Ya de paso, os dejo enlace a nuestro canal de youtube, donde podrás ver nuestra ruta por Canadá.
No pudimos apuntarnos a la excursión para ver osos porque ya estaba al completo, pero el guía nos habló de unas cascadas muy bonitas que estaban relativamente cerca del hotel y de fácil acceso. ¿Cómo llegar? Muy fácil, seguir los lazos rojos que hay colgados en los árboles. Ya, claro.
En busca de la cascada perdida 😛
A nuestra pequeña aventurilla se sumó una compañera de viajes que conocimos en Canadá. Así que los tres vamos felices, respirando aire puro y disfrutando del bosque. Los primeros metros son por un sendero de tierra (se ve que pasaban coches por ahí) pero al poco tiempo ya estábamos en el bosque y empezábamos, ilusionados, a ver lazos rojos por los árboles. Un juego de niños, esto esta chupado de fácil…ya ya.
No sé cuánto tiempo tardamos en darnos cuenta de que nos empiezan a faltar lazos rojos en el camino y sí, tenemos un río cerca, pero no terminamos de ver las cascadas que nos mencionaba el guía. Al final una se conforma con lo que hay, vi un pequeño salto de agua (nada en comparación con lo que nos habían recomendado, que ya vi después por internet).
Enrique apostaba por cruzar el río y volver por la otra parte, así haríamos una ruta circular (que era más o menos lo que nos habían dicho) pero yo, ante la falta de experiencia en el bosque (recordaba a cada momento que en la zona había osos), el anochecer avisando de su llegada y los pocos lazos rojos que iba encontrando, decidí que lo más prudente era volver por el mismo camino.
Bien, pongamos marcha atrás, pero ….oh oh….¿por dónde hemos venido?. Allí hay un lazo rojo, pero ¿y el siguiente? Si hemos pasado por aquí, ¿o no?. Yo veía que iba anocheciendo, que cada vez teníamos menos luz y que apenas veíamos lazos rojos. Niveles de estrés subiendo.
Seguimos un lazo rojo y al final llegamos a una zona casi intransitable. Recordábamos perfectamente que no habíamos visto a nuestra ida estas piedras ¿o sí? Que mareo ya.
Mente fría, mente fría
Nuestra acompañante mantuvo la serenidad y junto a Enrique empezaron a meterse por el bosque cual cabras montesas, a lo que mi mente racional decía: no puede ser, si el sendero está marcado (en plan señor de los anillos jajaja).
Queremos recordarte, que siempre que viajes fuera de España es conveniente tener un buen seguro de viaje, y mucho más en Canadá, nunca se sabe que puede ocurrir, y es mejor prevenir que curar. Por eso te damos un 5% de descuento para contratar tu seguro de viaje Heymondo.
Pues bien, gracias a ellos conseguimos salir a una especie de central eléctrica pequeñita que había por la zona y de ahí a una carretera que conectaba con el hotel. Nuestra aventura nos llevó un par horas (quizás tres), los móviles no tenían cobertura, y yo no paraba de pensar en cómo ahuyentar osos, en el hipotético caso de encontrárnoslos (o lobos), en fin, yo desvariando, pensando si alguien en el hotel sabía que habíamos salido a esta aventura y si tendrían el detalle de salir a buscarnos.
Sanos y salvos
Cuando volvimos al hotel, el marido de nuestra acompañante estaba en el hall del hotel, extrañado de nuestra tardanza (al menos alguien sabía que estábamos buscando las cascadas), que alivio.
La cena nos sentó de maravilla, fuimos los protagonistas de la misma, contando al resto la “gran” aventura que acabábamos de vivir. En fin, en aquel momento sentí mucho miedo, pero gracias a la mente fría de mis dos acompañantes, no pasó nada. Hoy en día, creo que es la aventura más extrema que hemos vivido; perdidos en un bosque, en plan supervivientes jajaja.
Como consejo y aprendizaje propio, la próxima vez iré mejor preparada a una excursión por un bosque. Es imprescindible avisar a alguien de lo que vais a hacer y de la zona por la que pretendéis ir. Aquí os dejo las coordenadas de google maps donde aparecen las cascadas, después de un par de años las he podido ver, eso sí, online.
Y hasta aquí esta aventura, espero que os hayáis echado unas risas con mi relato, yo hoy en día me divierto mucho contándolo y recordándolo, pero al mismo tiempo, espero aprendáis esta lección conmigo: Hay que ir bien preparado a las excursiones por el bosque y más si es en un país extranjero que no conocéis.
¿Habéis vivido alguna vez una experiencia similar o igual de estresante?
Cuéntamelo en los comentarios, toda experiencia aporta sabiduría y nos ayuda a mejorar en nuestros futuros viajes. Y, sí además, habéis conseguido completar esta ruta y ver las cascadas, mandarme fotos y narrarme vuestra «aventura».
¿Te llama la atención Canadá?
Aquí te dejamos nuestras entradas para que conozcas mejor el destino y así de paso, esperamos inspirarte.
- Hoteles en Canadá
- Luna de miel en Canadá – Ruta de 12 días por la costa este
- Preparativos para viajar a Canadá
- Conseguir la autorización eTa para Canadá
- Ruta de un día en Quebec
- 10 imprescindibles en Montreal
6 comentarios
En el momento lo pasas fatal, ¡pero luego se transforman en anécdotas para toda la vida! Me ha pasado algo similar en un bosque de Costa Rica, en el momento TEMOR al ataque de un puma pero hoy en día es una de las mejores cosas que me han pasado de viaje.
Hola Antonio,
La verdad que en su momento te acojonas un poco, pero como bien dices, son anécdotas que se quedan para siempre y luego lo recuerdas gratamente 😀
Gracias por el comentario 😉
Un saludo.
Son iguales como el enlace que has puesto de Google, Al menos este año estaba muy bien señalizado con carteles con flechas de colores que te indicaban las distintas rutas, la ruta más fácil por caminos de tierra (color amarillo), y la roja era por senderos más de bosque (roja). La cascada las cruza un puente de madera que pasas por lo alto de ellas y comunica la ruta fácil (de camino de tierra) con la roja (por senderos). Nosotros hicimos la fácil hasta el lago Loutre y a la vuelta cruzamos la cascada y volvimos por la de senderos (mucho más bonita).
Pues a las cascadas se tarda algo menos de una hora, lo que pasa que nosotros hicimos bastante más, creo que estuvimos unas 3 horas ya que llegamos a un lago a unos 4 kms. y vuelta, por el sendero que imagino 6 kms más.
De todas formas, como te digo estaba muy bien señalizado y vas bien, y aunque estaban los lazos que muestras en las fotos también había carteles indicativos, más un planito que nos dieron en el hotel y que lo hicimos sobre las 10 de la mañana pues ayuda.
El hotel, el lago, el entorno, para quedarse una semana. Como te digo es lo que siempre recordamos con más frecuencia. Y eso que el fiordo de Saguenay también espectacular.
Pues muchísimas gracias por aportarnos mas datos, así si alguien viene buscando información, tendrá tu relato. Me alegra ver que se ha mejorado el acceso para las cascadas. A mi la zona de La Maurice me encantó, sin embargo el fiordo de Saguenay me dejo un poco indiferente, lo mismo es que no le dedique el tiempo necesario. Me acuerdo de un pueblito por la zona que si que me llamo mucho la atención, creo que se llamaba Baie-Saint-Paul, me contaron que era el lugar donde nació el circo del sol. En general Canadá es un país fascinante. Ojalá pueda volver pronto.
Hola Marga:
Hemos vuelto de nuestro viaje por Canadá, muy parecido al vuestro. Gracias a tu consejo nos quedamos 2 noches en este maravilloso hotel. Ha sido del que mejor recuerdo tenemos, y eso que hemos estado en sitios y hoteles estupendos.
Nosotros si llegamos a las cascadas, je, je. Pero fue por la mañana temprano y con mucha luz (eso ayuda ).
Muchas gracias
Hola, que ilusión me ha hecho tu comentario. El hotel es una pasada y la zona de La Maurice increíble, sobre todo por la gran oferta deportiva que ofrece. Para mi, conocer la Maurice, es una visita obligatoria en la ruta de Canadá por el Este. Me alegro mucho que llegarais a la cascada ¿Como son? ¿Cuanto tardasteis? Un saludo.