Polo Norte o Polo Sur: ¿A cuál viajarías?

Portada, Polo Norte o Polo Sur ¿A cual viajarías?

Sólo existen dos puntos en todo el planeta en los que se crucen todos los meridianos de la tierra: el Polo Norte y el Polo Sur (geográficos). En ambos, si escogemos correctamente las fechas, podremos disfrutar de la experiencia única de disfrutar de 24 horas de luz y darnos un baño bajo el sol de medianoche, algo de lo que muy pocos pueden presumir.

No es la única característica que comparten: hablamos de dos viajes no aptos para aquellos viajeros que no estén dispuestos a afrontar el reto psicológico al que se van a enfrentar, aunque presenten requisitos físicos muy dispares, la sensación de soledad, de enfrentarse al vacío forma una parte esencial de ambas experiencias. Vamos a proponer dos rutas, una de las cuales nos dejará en un lugar donde todas las direcciones nos llevarían al sur y la otra tratará de coronar el único punto de la Tierra donde siempre miraremos al norte.

Polo Sur - Los viajes de Margalliver
Fuente: Wikimedia

POLO SUR

Hace más de un siglo que Amundsen y Scott se embarcaron en la aventura de poner un pie en el Polo Sur Geográfico, y con el mismo afán de adentrarnos en lo inhóspito nos uniremos a una expedición que nos llevará a alcanzar la base científica que marca los noventa grados sur y que fue bautizada en honor del noruego y del británico que encabezan este párrafo. Para ello hará falta recorrer los aproximadamente 100 kilómetros del último grado de latitud con esquíes, a más de tres kilómetros sobre el nivel del mar, con un desierto blanco como única compañía, donde solo el hielo y la nieve serán testigos de nuestro esfuerzo. Y siempre que las condiciones meteorológicas lo permitan.

Roald Amundsen y Robert Falcon scott alcanzando el Polo Sur - Los viajes de Margalliver
Roald Amundsen y Robert Falcon Scott alcanzando el Polo Sur. Fuente: flickr.com

Antes siquiera de coger el primer avión hacia Punta Arenas, el primero de los destinos para todos aquellos aventureros que se hayan propuesto este reto (o el de escalar el monte Vinson, el techo antártico), nos encontramos con un primer desafío: prepararse para hacer frente a condiciones climatológicas extremas.

Aunque nos hemos propuesto un objetivo asumible para cualquiera que se mantenga con una buena forma física y que goce de buena salud, es importante contar con cierta experiencia con los esquíes, así como trabajar la condición física de forma específica. La travesía no presenta grandes dificultades técnicas, pero sí va a poner a prueba nuestra resistencia: habrá que arrastrar unos trineos que pesan alrededor de 25-35 kilos sobre superficies poco uniformes a menos de -25 grados.

Tras cumplir rigurosamente con la preparación física, llegamos al hotel de Punta Arenas. Llega el momento de revisar el equipo y reunirnos con el resto del grupo para repasar los planes y hacer los últimos ajustes. Estamos en manos de la climatología, así que conviene mantenerse al tanto del estado del tiempo en Union Glacier, el siguiente punto de nuestra ruta, para no tener problemas con cambios de horarios en los vuelos. Si todo discurre sin incidencias, nos espera un viaje en avión de algo más de cuatro horas. Te mostramos 10 consejos para encontrar vuelos baratos.

Union Glacier en el Polo Sur - Los viajes de Margalliver
Fuente: Pixabay

Dejaremos atrás Tierra del Fuego, el área más meridional de Argentina, para pasar a sobrevolar uno de los océanos más temidos del planeta. El paso de Drake anota olas de más de treinta metros y sus tormentas han sido el terror de los marineros más expertos. No tardaremos mucho en llegar a la zona donde comienza a regir el Tratado Antártico Internacional. Estamos en la Convergencia Antártica, auténtico origen de la cadena trófica y que sostiene al ecosistema antártico.

Si tenemos suerte seremos testigo de un paisaje excepcional, donde mastodónticos bloques de hielo e inmensas placas sirven de hogar a focas y pingüinos. Acabamos de superar el Círculo Polar Antártico, esa zona donde coexisten los días sin noche (verano austral) y las noches sin día (invierno austral). Charcot Island nos recibe a nuestra llegada al Continente, a 71 grados de latitud. A lo lejos, las montañas Ellsworth indican que no falta mucho para que podamos pisar tierra firme; la pista de aterrizaje nos espera en una zona de hielo azul, libre de nieve gracias a los vientos de la zona.

Todavía nos esperan casi diez kilómetros hasta el campamento de Union Glacier, el cuartel general desde donde nos prepararemos para la aventura. Es fundamental hacer una expedición de prueba para evaluar el estado del equipo y acostumbrarnos a su uso, así como para descartar problemas físicos de última hora y acostumbrarnos a las condiciones ambientales de la Antártida.

Campamento de Unión Glacier en el polo Sur - Los viajes de Margalliver
Campamento Union Glacier. Fuente: Wikimedia

Llega el momento de volver al avión, esta vez con la intención de quedarnos a un solo grado de los 90º sur. Una vez allí, a solo 100 kilómetros de nuestro objetivo, el prístino horizonte casi infinito del paisaje austral, donde solo la nieve y nuestros compañeros rompen la sobrecogedora sensación que produce el vacío que nos rodea, nos recuerda que la naturaleza jamás pensó en ver a un ser humano pisar estas tierras gélidas.

Una vez asumido que tenemos 5 días para alcanzar el Polo Sur, comienza la rutina: amaneceremos a las ocho de la mañana para iniciar la ruta dos horas más tarde. El plan pasa por alternar tramos de cincuenta minutos con pequeños descansos. La alimentación es fundamental, así que las paradas del almuerzo y la cena se cumplen religiosamente, para acabar la jornada a las 17:00 h. Es el momento de descansar y compartir las experiencias al abrigo de las tiendas.

Conforme se reduce el peso de los trineos y nuestros cuerpos se adaptan al rigor del entorno, pasaremos de los apenas siete u ocho kilómetros diarios a los más de 18 de las últimas etapas. A veinticinco kilómetros de nuestro destino, no es una “X” sino la base de investigación Amundsen-Scott la que marca el lugar. Tanto Amundsen como Scott, con apenas días de diferencia en su hazaña, concluyeron que este último tramo se les hizo el más duro de todos. Llegados hasta aquí, solo queda entregarse a la soledad y disfrutar de sabernos en un territorio donde las fuerzas de la civilización no son rivales para el viento y la nieve, y el hombre se ve obligado a reencontrarse con la naturaleza.

Letrero de Polo Sur - Los viajes de Margalliver
Polo Sur. Fuente: noaa.gov

El retorno a Punta Arenas no suele dejar lugar para la contemplación del paisaje, y lo más frecuente es que el grupo aproveche para empezar a reponerse del esfuerzo, pero la satisfacción por la experiencia vivida es el mejor bálsamo. Como nos esperan varios meses antes de poder poner rumbo a nuestra siguiente escala y tenemos tiempo para recuperarnos del desgaste, aprovechamos nuestra estancia en Chile para visitar uno de los destinos turísticos por excelencia del país: Viña del Mar. Para recuperar parte del calor perdido, es casi una obligación dar un paseo por los alrededores del Casino Enjoy, epicentro de la noche de la ciudad y sede de eventos de categoría mundial, como el prestigioso PokerStars Festival. El ambiente en los alrededores de casino es extraordinario y nos ofrece el espacio perfecto para volver a retomar contacto con la civilización.

Lo Mejor:

  • La experiencia de alcanzar por tus propios medios el Polo Sur Geográfico y de disfrutar de días con 24 horas de luz ininterrumpida
  • Poder esquiar en uno de los entornos más vírgenes del planeta, sobre una capa de hielo que deja 3.000 metros bajo nuestros pies
  • Visitar uno de los espacios más extremos habitados por el hombre (la base científica Amundsen-Scott)

Precio orientativo: 65.000 € (no incluye equipamiento y seguros)

Fechas Recomendadas: diciembre – febrero

 

POLO NORTE

Afortunadamente, para alcanzar el Polo Norte Geográfico no nos veremos obligados a sufrir los contratiempos para acceder a la zona que tuvimos en el sur. Tampoco las condiciones que vivió, por ejemplo, Pearyconsiderado por muchos el primero en llegar. Fue en 1909, seis años antes de lo que se descubriría en el Polo Sur. Junto a otros míticos exploradores como Herbert y Uemura (que poblaron de visitas la zona durante todo el siglo XX) tuvieron que recorrer más de 800 km de mar helado antes de alcanzar el Polo Norte.

Robert Peary, primero en llegar al Polo Norte - Los viajes de Margalliver
Robert Peary, primer hombre en llegar al Polo Norte. Fuente: wikipedia.org

 

Hoy, es posible llegar a la “cima” del mundo en helicóptero. Partiremos desde la estación temporal rusa Barneo, un lugar ideal para aclimatarnos, ya que está situada en un témpano a la deriva en pleno Océano Ártico a 89º de latitud Norte. El vuelo hasta el Polo Norte tiene una duración de 40 minutos. La visita, que ronda la hora y media de duración, es uno de los momentos más intensos del viaje: un paisaje inédito y absolutamente fascinante aparecerá ante nosotros.

Pero no adelantemos demasiados acontecimientos. Hay todo un viaje hasta llegar allí, con dirección Longyearbyen (Spitsbergen–Noruega) vía Oslo en vuelo regular. Será la última oportunidad para disfrutar de las comodidades de la civilización. Al día siguiente, nos trasladaremos al aeropuerto de Longyearbyen para tomar el vuelo hacia Barneo, situada a 89º norte, que dura unas 2 horas y media. Una vez llegados a Barneo, se descubrirá la Ice Camp Base.

Polo Norte - Los viajes de Margalliver
Fuente: Pixabay.com

Aquí es donde comienza la verdadera aventura. Experimentaremos una temperatura de entre -24 y -30 grados. Por fortuna, el mejor sistema de calefacción de la Ice Camp Base es el instalado en nuestras tiendas, por lo que podremos apreciar las bajísimas temperaturas en la medida que nos apetezca. Cada tienda acogerá entre 10 y 12 participantes de la Expedición.

La comodidad de estas cabañas no se puede comparar con la austeridad de las tiendas de campaña del campamento en el Polo Sur –aunque ello suponga renunciar a una experiencia más cercana gracias a la cercanía que aporta la tienda de campaña.La experiencia de dormir en un espacio climatizado en Barneo es probablemente uno de los contrastes más extremos y, a la vez, más confortables que se pueda experimentar en el Planeta.

La siguiente jornada nos llevará a viajar en un helicóptero ruso, el MI-8. Tras un vuelo de unos 40 minutos, alcanzaremos la meta, un punto de la Tierra que muy pocos han podido contemplar, con una aire y una luz pocas veces experimentados por los humanos. ¿Cómo serán los días en los que no amanece? ¿Y aquellos en los que no se pone el sol? Estamos nada menos que en uno de los puntos más interesantes del Planeta desde el punto de vista geológico, el más septentrional, el único en el que todo el resto es sur.

La experiencia en el polo puede que haya sido breve, pero de vuelta al campamento base de Barneo podrás entregarte a un sinfín de actividades, además de disfrutar de uno de los mejores parajes para los amantes de la fotografía.

Lo Mejor:

  • La experiencia de alcanzar el Polo Norte Geográfico y de disfrutar de días con 24 horas de luz ininterrumpida
  • Los fanáticos de esquí podrán disfrutar de la experiencia de la banquisa, uno de los espacios vírgenes más deseados, sobre un océano de más de cuatro kilómetros de profundidad como testigo.
  • Poder compartir el momento con quien tú quieras con las llamadas vía satélite.

Precio orientativo: 17.500 € (no incluye seguros; incluye kit de prendas polares).

Fechas Recomendadas: abril-junio.

NOTA: Escojas la opción que escojas, ten en cuenta que las condiciones meteorológicas y del terreno pueden conllevar retrasos y modificaciones en tus planes de viaje. Resulta recomendable no ajustar las fechas en exceso y disponer de días de margen para hacer frente a las circunstancias que nos podamos encontrar, sobre todo en el caso del Polo Sur. Es conveniente añadir seguros de cancelación y rescate a los habituales seguros de viaje, así como llevar contigo un certificado médico.

Queremos recordarte, que siempre que viajes fuera de España es conveniente tener un buen seguro de viaje, ya que nunca se sabe que puede ocurrir, y es mejor prevenir que curar. Por eso te damos un 15% de descuento hasta el 24 de marzo, para contratar tu seguro de viaje Heymondo.

Igualmente se recomienda un entrenamiento previo y una mínima experiencia montañera. Resulta conveniente prepararse con ejercicios aeróbicos, como correr o nadar. Si nos decantamos por visitar el Polo Sur, habrá que añadir también entrenamiento de arrastre en playas o dunas, para sentirnos más cómodos con el trineo.

 

 

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4 comentarios

  1. No es Tierra de Fuego
    Es Tierra Del Fuego. Y no pertence a Chile, pertenece a Argentina.
    Yo vivo en la Capital de Tierra Del Fuego. Ushuaia

  2. Una pasada, sea cual sea el polo que elijas =)

    Gracias por toda la información, nunca había visto de forma tan específica el presupuesto a los polos! Por añadir algo de literatura a quien le i terese, es libro «El peor viaje del mundo», de Cherry Apsley Gerrard es un imprescindible para conocer la realidad del polo sur. Fue uno de los expedicionarios que viajó con Scott, y el relato es terrible, a la vez que una aventura como pocas se han vivido.

    En fin, nos seguimos leyendo! Un saludo!

    Jabi

    1. Hola Jabi!

      Gracias por el comentario, la verdad que ir a cualquier polo tiene que ser una experiencia fascinante. Gracias por el aporte del libro, me imagino que tuvieron que pasarlo realmente mal en esa expedición, nos apuntamos el nombre para echarle un vistazo 😉

      Saludos!!

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